Uno de los sitios que siempre visito antes de visitar una ciudad o país nuevo es la página web de Tripadvisor, donde otros viajeros critican (positiva o negativamente) sus experiencias en hoteles, restaurantes y demás.
Una de las escuelas de cocina que mejores críticas tenía hasta el momento era 'Thai farm cooking school' que con más de 400 calificaciones de 'excelente' la sitúan en el número 6 de 255 actividades registradas en Chiang Mai. Casi nada, había que probarlo.
Aquí os dejo la página web de la escuela por si os apetece echarle un ojo. Tiene fotos muy buenas de las instalaciones y de los productos que cultivan en ella.
Bien, esa mañana, a eso de las 8 nos pasaron a recoger por el hotel y nos llevaron a un mercado en las afueras de la ciudad. Allí, y guiados por nuestra profesora, pudimos ver los diferentes productos que utilizan a diario para cocinar.
Fijaos en la cantidad de arroces diferentes que tienen... Antes de vivir en Asia pensaba que había solo dos tipos, el normal y el integral, y luego descubrí el glutinoso, o arroz dulce, que se utiliza entre otras cosas para hacer sushi o diferentes tipos de postres. Pues bien, no conocía nada hasta que vi este mercado...
Otro de los productos estrella del mercado eran las pastas para hacer curry, mezcla de especias y chiles que dan sabor y color al plato, indispensables en la cocina tailandesa:
En la foto se pueden ver varios colores, amarillo, rojo y verde, por 10 Baht (2'5 céntimos de euro) cada bolsa.
Después de dar una pequeña vuelta por el mercado por nuestra cuenta continuamos camino hasta la granja, donde teníamos ya todo preparado para empezar las clases.
La zona donde se encuentra la granja no podía ser más tranquila. No había nada alrededor, a no ser por una vaca que andaba por ahí perdida...
Eso sí, el Sol era justiciero, como de película del oeste...
Lo primero que hicimos fue dar una vuelta por las huertas que tenían, donde nos enseñaron cómo cultivaban las frutas y verduras, todas estas de manera orgánica, sin ningún producto químico:
Menos mal que tenían sombreros preparados, porque debíamos de estar a unos 35-40 Cº... Esto el 3 de enero, señores...
Bien, después de esto llegamos a las instalaciones donde íbamos a cocinar. Un sitio estupendo, a la sombra y con ventiación. Perfecto.
Aquí era donde teníamos las cocinas:
Y justo en la parte exterior estaba la mesa-comedor donde prepararíamos varios de los ingredientes:
Durante el trayecto en coche nos entregaron un papel donde tuvimos que marcar los platos que queríamos aprender a cocinar:
Haced click en la foto para verla ampliada |
Os los traduzco aquí:
1- Pasta para hacer curry: curry verde, curry rojo o curry amarillo.
2- Curry: curry verde con pollo, curry rojo con pollo o curry amarillo con pollo. Evidentemente la elección de la pasta determinaba el color de este plato.
3- Sopa: Tom Yam Kung con langostinos, pollo en leche de coco o sopa de verduras tailandesa.
4- Plato cocinado en wok: pollo con frutos secos, verduras con salsa agridulce o pollo con albahaca (nosotros tuvimos la opción de tofu con verduras y anacardos ese día).
5- Plato de pasta: rollos de primavera (tailandeses, no fritos), Pad Thai o noddles grandes cocinados en wok.
6- Postre: plátanos en leche de coco, mango con arroz dulce o calabaza en leche de coco.
Los platos en negrita son los que escogimos Anthea y yo. La verdad es que la cocina tailandesa, junto con la japonesa (y la asturiana, cómo no!!!) son nuestras preferidas, y todos los platos que escogimos, menos el número 4 quizás, son los más típicos.
Lo primero que hicimos fue preparar la pasta para hacer el curry, machacando chiles verdes, otras verduras y especias en el mortero hasta tener la pasta lista y la dejamos a un lado.
A continuación empezamos con la sopa. La que escogimos nosotros, conocida como Tom Yam Kung, es espectacular, no hay otra manera de describirla. Y teniendo los ingredientes listos se cocina muy rápido.
Anthea en su cocina preparada para la acción |
Tom Yam Kung |
Varios de los ingredientes que se utilizan en todos estos platos son muy desconocidos en Europa, y son esenciales para conseguir el sabor y la textura de los platos que queremos cocinar. Como por ejemplo las hojas de lima Kaffir o la salsa de pescado que utilizamos para esta sopa (la salsa no sale en la foto superior, la mezclamos con el agua al empezar a cocinar el plato).
Apartamos la sopa a un lado y nos pusimos a cocinar el curry, para el que habíamos hecho la pasta anteriormente. La profesora había puesto arroz a cocinar en una cesta al vapor al llegar por la mañana y sería el acompañante del curry a la hora de comer.
Curry verde con pollo |
Para este plato tuvimos que utilizar más ingredientes 'raros' que 'conocidos', como por ejemplo ese tipo de 'guisantes verdes' que se ven en las fotos, que son en realidad berenjenas diminutas...
Después de cocinar el curry tocaba comer. Tom Yam Kung de primero y curry verde con pollo y arroz de segundo. Vaya sorpresa, eh? Y justo después unos minutos de descanso antes de la segunda sesión.
En esta segunda parte empezamos por el tofu con verduras y anacardos:
Ingredientes (sin contar las salsas, sal y demás) |
Demostración de la profesora |
Resultado final mío |
Y resultado final de Anthea (igualmente excepcional, pero sin llegar al nivel de servidor) |
Justo después nos lo metimos entre pecho y espalda, y acto seguido continuamos con el postre, en mi caso el mango con arroz dulce y leche de coco, acompañado de una taza de té de limón natural. Este postre es otra maravilla:
En este momento ya le había metido varios ataques al plato, como se puede apreciar |
Y esto no es todo señora! Todavía faltaba otro plato, y vaya plato, uno de mis platos favoritos de todos los tiempos, el PAD THAI (hay que escribirlo todo con mayúsculas porque se lo merece).
Se trata de un plato salteado en wok a base de fideos de arroz con huevos, salsa de pescado, salsa de tamarindo, pimiento rojo, y cualquier combinación de brotes de soja, gambas, pollo (o tofu), decorado con cacahuetes picados y cilantro. Se sirve habitualmente con una rodaja de lima, cuyo zumo de esta fruta se añade al plato como condimento.
Pad Thai |
Creo que las 10 personas que estábamos cocinando yo fui el único que se atrevió a comerlo ahí mismo; los demás lo llevaron en una bolsa de plástico. Aficionados...
En fin, esta fue una experiencia más que recomendable y entretenida, además por un precio más que asequible (creo que nos costó unos 24€ por persona, si no recuerdo mal).
La próxima vez habrá que repetir.
Pero vamos a ver,....cuando les vas a enseñar lo que es un chuletón de buey a la piedra? un queso de cabrales a la sidra? unos tortos con picadillo? una zapica de sidra?, un revuelto de oricios?,.....que todavía no saben lo que es bueno,.......un agrazo Genio!!!!
ResponderEliminarSi les enseño todo eso de golpe igual les da algo, Luís. Por cierto, te faltó mencionar el cachopo de fabada y los escalopines en arroz con leche, grandes clásicos de la cocina asturiana, junto con el cabrales a la sidra que comentabas. Un abrazo!
Eliminarcierto,...también el helado de berzas y la compota de matachana!!!!!
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