Primera ruta

El otro día os contaba que el 90% de los empleados del resort en el que nos encontrábamos provenían de una de las aldeas cercanas. Pues bien, para llegar de un sitio a otro tienen varias opciones:

- Si la marea está baja normalmente caminan por las playas entre su aldea y el hotel (unos  20 minutos, más o menos).

- Si la marea está alta vienen en grupos en barcas. Si no tienen barca esperan en la playa que hay al lado de la aldea a que pase alguien y los recoja. Recordad que aquí los relojes no existen. No hay horarios. Es lo que ellos llaman 'Fiji time'.

- Y luego hay otra ruta. Esta es bastante más larga (1'5h o así) y más complicada, porque pasa por varias colinas/montañas e incluye varias rampas de una inclinación poco menos que 'cabril'. Ahora sí, las vistas desde allí, impresionantes, o eso prometían...

Qué mejor manera de empezar nuestro primer día en Fiji que haciendo esta ruta a las 7:30 de la mañana... Así que venga, a desayunar a las 7:00, cámara en mano y andando.

Nada más empezar había que subir una colina desde donde se podía ver el resort desde arriba y parte de una isla cercana:

Y seguimos caminando... Fijaos en la altura de la hierba... Aunque no se vea, había un sendero:

 
Desde más arriba, las vistas eran aún mejores:

Aquí se puede ver el hotel al fondo y las montañas por las que habíamos pasado

Y esto es lo que se veía al otro lado

Poco a poco nos fuimos acercando a la parte más alta del recorrido:

 

Donde aprovechamos para hacer una parada técnica y sacar unas cuantas fotos:

Este es el lado desde el que veníamos

Y este al que nos dirigíamos

Esta última foto requiere una pequeña explicación. Lo primero que me llamó la atención fue el campo que hay ahí en el centro. Yo pensaba que esa era la aldea... pero no! eso era solo el colegio que hay en la isla, con su espectacular campo de rugby en medio. La aldea está más a la derecha en la imagen, entre los árboles (si ampliáis la foto se puede ver algo). 

Esto ya me dejó un poco decolocado. Osea, vamos a ver (iba pensando yo), estamos en una aldea perdida en una de las islas más inaccesibles de Fiji, y lo primero que se ve es un campo de rugby... No me extraña que sean una potencia mundial en este deporte! Os acordáis cuando os hablaba del rugby sevens? Pues de aldeas como esta es de donde salen los jugadores... Pero bueno, no os preocupéis, del colegio y de la aldea en sí hablaré en otro momento.

El final de ruta consistía en bajar cerca del campo de rugby y caminar hasta la playa que hay a mano izquierda, donde nos recogería una barca para llevarnos de vuelta al hotel.

Así que empezamos a bajar:

 

Hasta que llegamos. La isla que había enfrente de la playa tenía buena pinta, eh?

Mientras esperábamos por la barca, estuve hablando con nuestro guía, Tevita, que hizo toda la ruta descalzo (dice que así no se resbala por las pendientes...). Y pasaron 10 minutos, 15 y 20 y allí no aparecía ningún barco. Igual ya había pasado... o no... quién sabe, no hay relojes! Fiji time!

Así que decidimos seguir caminando por la playa hasta que llegamos al hotel. Pero bueno, qué problema hay en caminar un poco por estas aguas? Ninguno.